Un aporte de Nina de Papuzza
Fragmento del cuento: "La Reina"
"La pintaba amorosamente, adorándola, como si fuera una actividad sagrada..."
"Con el roce del pincel los pezones se le endurecieron como botones. Cada curva me producía placer.
Me solté los pantalones y dejé el pene libre. En ningún momento me miró. Seguía de pie, y sin moverse.
Mientras pintaba las caderas y el valle que conducía al vello del pubis, se dio cuenta de que no sería capaz de terminar mi tarea..."
Anaïs Nin. "Pájaros de Fuego"